La Hermandad isleña de Nuestra Señora del Rocio comenzó en la mañana de ayer lunes su peregrinar hasta la aldea de Almonte para rendir pleitesia a la Blanca Paloma.
Como es constumbre desde la reorganización josefina, la Hermandad filial del Rocio se despide a su paso por la Iglesia Mayor, del Patrón de la Isla para pedirle su protección en el camino.
Nuestra Hermandad recibió a los rocieros en el atrio de la Iglesia Mayor con bandera y varas y ambas coorporaciones marcharon por las naves del templo al son de flautas y tamboriles hasta el altar de San José donde se vivieron momentos intensos.
Tras las palabras del Director Espiritual de la Hermandad del Rocio y hermano nuestro R.P.Alfonso Gutierrez, se rezó la Salve Josefina; nuestro fiscal agradeció a los rocieros su presencia y reclamó la protección del Patrón, procediéndose a continuación por parte del Hermano Mayor de la Hermandad del Rocio a realizar una ofrenda floral a San José. Tras las palabras de D. Alejandro López y de los cantos y vitores en honor de ambas advocaciones, nuestra Esclavitud realizó la pertinente ofrenda floral al Simpecao isleño y se reanudó la marcha con la presencia en el cortejo de nuestra Hermandad y de la pequeña imagen vicaria del Patrón que preside la carreta rociera.
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