Pesar por el fallecimiento de Alfonso Berraquero.

Esta mañana, que nacía jubilosa con la celebración del tercer domingo de abviento o de gaudete, se torcía hacia las 12 del mediodía al conocerse la triste noticia del fallecimiento de nuestro hermano e Hijo Predilecto de San Fernando, Alfonso Berraquero García.

Si algo caracterizaba a Alfonso Berraquero era su bondad, su alegría y su generosidad; siempre tenía su casa abierta y recibía en ella a cuantas personas necesitaran su ayuda. Como artista, San Fernando y sus cofradías no serían lo mismo; en una época difícil ayudó a nuevas hermandades con la creación de sus titulares o la restauración de los mismos, casi el 75% de nuestras imágenes han salido o pasado por las manos de Alfonso, siempre con su particular forma de entender la escultura, con fuerza y expresividad.

Alfonso fue también el sanador de San José; cuando nuestro Titular estaba casi abandonado y los desperfectos comenzaban a hacerse notables, Berraquero sanó al Patrón de forma totalmente desinteresada; años después el Patrón volvía a su taller para reparar leves desperfectos y, de paso, acometer una limpieza de la policromía que le devolviera la plenitud a su rostro y, de nuevo, lo hizo de forma desinteresada, por amor a San José y reconocimiento a los jóvenes que lo habían devuelto al culto.

Alfonso Berraquero recibe el diploma de hermano distinguido de la Hermandad.

Alfonso Berraquero era hermano de antiguo y desde la reorganización colaboró con la Hermandad, no sólo como sanador del Patrón, sino también donando objetos para el ajuar de las imágenes o proyectando dibujos, por ejemplo.  Por todo ello. fue nombrado hermano distinguido en el año 2010, un pequeño agradecimiento ante tanta generosidad.

Durante toda esta tarde se vela el cuerpo de nuestro hermano en el tanatorio de San Fernando, mañana será la misa funeral corpore insepulto en la parroquia de la Divina Pastora de la que era feligrés y hermano distinguido. El ayuntamiento ha decretado 3 días de luto oficial en homenaje a su Hijo Predilecto.

Hoy se ha apagado la vida de la persona, del hermano, pero Alfonso Berraquero permanecerá en la historia de la ciudad, de la Hermandad y de los corazones de aquellos que tuvimos la suerte de conocerlo. Ya Alfonso conoce la gloria de Dios y habrá departido con San José al que seguro le habrá pedido por nosotros con su genial sentido del humor donde eramos sus niños o sus "bichas". Descanse en paz hermano y que el Patrón te guíe.

Con cariño, Escarchi.